Muchas veces, pensamos que cuando la gente nos da un consejo y la respuesta que se nos da no es la que deseabas oir, es porque realmente el consejero no sabe bien la situación, o simplemente porque aparentemente no quiere que hagas bien... por eso pasas del consejo y haces lo que realmente sientes...
Pero claro, va pasando el tiempo y ves que los consejos taaaan malos que te daba todo el mundo( pues no eran lo que realmente querías escuchar...) te dan la razón mientras vas viendo todo lo que, a todo pronóstico te recetaban los consejeros, pero aún así, sigues haciendo lo que tu corazón te dicta, sea o no lo correcto!
Y bueno, vas viviendo decepción tras decepción a contracorriente de lo que ya sabes que es un gran error, pero con la pequeña esperanza de que a lo mejor tu corazón tenía la razón en lugar de esa gente que no sabe lo que te dice....Buuuaaag! Tonterías al fin y al cabo....
Y llega el detonante final! Si, ese momento en que ya no aguantas más y estallas....ese momento en el que la razón puede al corazón y en el que tienes que admitir la derrota de aquellos consejos que te daban.....
Pero realmente....¿ Qué duele más...el tener que reconocer un error, o la decepción sufrida...?
